Una de las tendencias de las sociedades es buscar culpables. Aveces la manzana no cae tan cerca del árbol y tenemos que mirar un poco más allá de lo obvio. Tal es el caso de las recientes matanzas que abre el debate de la violencia en los medios de comunicación y no sobre la inseguridad que generan las armas.
Los medios de comunicación tienen una función, informar. Pero son como todo en la vida, elegirán el camino que más les convenga. Habrán quienes lo hagan de una manera responsable y con un fin meramente social, y habrá quienes lo hagan de manera exclusivamente lucrativa. De todas formas no podemos culparlos de lo que nosotros mismos hemos elegido consumir.
Las sociedades cuando tienen problemas busca un culpable, en este caso son los medios. Es más fácil desviar la atención del verdadero problema, matando al mensajero,que buscar los factores que han tenido que ver en ese acontecimiento.
El tener armas es una responsabilidad de la persona, al igual que es responsabilidad de los congresistas legislar para controlarlas. Lo que funcionó hace cientos de años, no tiene por qué seguir funcionando ahora, por eso se evoluciona y se cambia lo que nos pueda perjudicar.
También la tendencia a la generalización puede crear ciertos prejuicios que pueden afectar el sentido de las cosas. Que en los Estados Unidos no se haga un buen uso de los medios y se juegue con los sentimientos de su audiencia, no tiene por que ser la norma para el resto de países. Y nunca debería serlo.
El apagar la tele no acabará con la violencia desmedida en el mundo, pero si lo hará el control de armas. Es muy simple buscar medidas rápidas a un dilema que se remonta muchos años atrás.
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